Mural cerámico de dieciséis metros, compuesto por tres tramos cuyo centro es una olivera natural. Un primer tramo ubicado en frente de la calle Olivaret, compuesto por un conjunto de seis mujeres, cuya indumentaria de colores grises nos dejan adivinar que son mayores. Arrodilladas en el suelo recogen las aceitunas de forma natural y espontánea de maduración, método laborioso, con muchas horas de trabajo, que requiere que este el terreno limpio de hierbas. De ahí el fondo con tonos de arcilla. Anchura del panel 3.50 por 0.90 de alto. En primer plano vislumbramos dos capazos de esparto llenos de aceitunas. El segundo tramo, ubicado en linea recta de la avenida Castellón compuesto de izquierda a derecha, por cuatro sacos, una mujer de pie recogiendo una vara, que solían tener un largo de dos o tres metros, y con las que se golpeaba la partes mas altas del árbol. Método mas rápido que el anterior de ahí la presencia de los sacos. A su lado otra mujer arrodillada recogiendo del suelo las aceitunas sobrantes. Luego otro grupo de cuatro mujeres recogiendo del suelo y un niño con la ardua tarea de vaciar la manta llena de aceitunas resultantes del vareo. Este es el tramo mas ancho de ocho metros aproximadamente por noventa centímetros de alto. El tercer tramo ubicado en frente de la calle meridiano de Greenwich. Compuesto por una joven de indumentaria de colores rosa y azul recoge para su vaciado una manta interminable ayudando a un hombre mayor. Este es el punto mas alto del conjunto de las tres partes del trencadís para dar mas énfasis a la sabiduría del anciano. Su tamaño es de cuatro metros de ancho y un metro diez de alto. Elaborado con cerámica de gres porcelánico cortado a modo de trencadís. Conmemora las raíces agrícolas de la Vall d’Alba y su gran extensión de terrenos dedicado al cultivo de muchas variedades de aceitunas. Es un homenaje a las técnicas de antaño así como a la gente del campo de otros tiempos.
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